Si a tu alrededor todo es silencio, y ves que la gente que te acompañaba se marcha de tu lado, que está todo oscuro y no ves un horizonte nítido ni pleno, no desesperes, porque ninguna crisis es eterna, ninguna catástrofe nos ha todavía sepultado. Si a tu alrededor, ves que los demás te miran con recelo, que no encajas en ninguna cuadrícula prefabricada, que la pauta es un renglón incómodo, que es mejor atreverse a escribir por el otro lado, no desesperes, porque no todos entienden de ser distinto, y esta cualidad se vuelve incómoda al ser gris y anodino que habita las destartaladas ciudades sin forma ni tamaño. Si a tu alrededor, la vida empeora y la realidad se vuelve turbia, no desesperes, porque un mañana soleado, libre de culpas y de pesadas cargas del pasado, te espera. Ama, diviértete, ríe y si no puedes hacerlo piensa en algo positivo, construye el arte en movimiento.